CAMÍN DE SOMONTE
CON ALGUNA PARADA PARA TOMAR UN CULÍN
El tiempo está a mi servicio
La holganza debería de ser el estado natural del ser humano, tener la posibilidad de disponer del tiempo a nuestro gusto para poder hacer todo aquello que nos apetezca y que no entre en conflicto con las apetencias de los otros. En este momento yo me encuentro en esa circunstancia. Hacer entradas en este espacio para entretenerme será una de mis ocupaciones. Sería increible que pudiesen interesar a alguien.
Somonte
Aquí empezó todo. Cuatro cases que ya no existen porque a mediados de los sesenta una serie de empresas se unieron para crear una gran siderurgia: UNINSA.
El 30 de julio de 1966, el despacho del notario Javier Migoya Valdes, en el edificio La torre de Bankunión, en Álvarez Garaya (Gijón), acogía la firma de los acuerdos entre las tres empresas siderúrgicas asturianas privadas del momento. Sus protagonistas tenían nombres, apellidos y título nobiliario: Luis de Urquijo y Landecho, marqués de Belarque, por Duro Felguera; José Tartiere de Las Alas Pumariño, conde de Santa Bárbara de Lugones, por de SIA Moreda-Gijón, y Manuel Loring Guilhou, conde de Mieres, por Fábrica de Mieres, rubricaban la puesta en marcha de la sociedad Unión de Siderúrgicas Asturianas, S. A., conocida como ‘la gran Uninsa’, el embrión del que hoy es el mayor grupo mundial del acero, ArcelorMittal. (La información está copiada del diario El Comercio).
El 15 de agosto de 1967 cogimos el montante y enfilamos el camín de Xixón.
La última casa de la derecha era la nuestra. En el primer término de la foto ya se ve el comienzo de las obras.
El verano del amor
Poco antes de que nosotros dejásemos Somonte, Scott McKenzie convocava en San Francisco a los hippies de medio mundo animándoles a que llevasen flores en el pelo Be Sure To Wear Flowers In Your Hair. Como todo lo puede el vil metal, no era más que un intento de la industria discográfica para comercializar un movimiento contracultural que se había gestado en el barrio de Haight-Asbury. Así comenzó el verano del amor.
Ese verano, entre el 16 y 18 de junio, se celebró lo que se considera el primer festival de música rock al aire libre, el Monterey Pop Festival. Pete Townshend siguió rompiendo guitarras, a Jimi Hendrix le pareció poco y la quemó.
Aquí una maravillosa y casi desconocida Janis Joplin junto al grupo Big Brother and The Holding Company cantando Ball and Chain.
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Por si fuese poco, en ese año salieron al mercado discos que han tenido gran trascencencia en el posterior desarrollo de la música popular, cito alguno de ellos: Forever Changes (Love), Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band (The Beatles), The Velvet Underground & Nico (The Velvet Underground & Nico), Disraeli Gears (Cream), Strange Days (The Doors), Are You Experienced? (Jimi Hendrix).
Comento esto porque había un brutal abismo entre una parte del mundo, lo que entendemos por mundo desarrollado, y el pueblo que dejé y la ciudad-pueblo a la que llegué. Esto resulta muy significativo para los que vivimos aquella época, aquella emigración del campo a la ciudad. Y resulta aún más significativo cuando escuchamos a jóvenes que tienen un buen nivel de vida, que han viajado, que han estudiado, que supuestamente están bien informados "añorar" aquellos tiempos.
Termino este comentario con la canción, también de aquella época, A Whiter Shade Of Pale del grupo Procol Harum. Es un tema con una letra difícil de interpretar, puede que hable de la pérdida, de la tristeza o de la resignción. Son muy significativas las imágenes sobre la guerra de Vietnam. Eso sí, lo que son las cosas, poco después su característica instrumentación inspiró la canción Je t'aime... moi non plus del extraordinario Serge Gainsbourg. Los duetos, primero con Brigitte Bardot y luego con mi adorada Jane Birkin levantaron chispas, a ver, chispas y algo más.